En los años que corren, existen pocas cosas con las que la gran mayoría de nosotros podamos ponernos de acuerdo de forma unánime. Una de ellas sería, sin duda, el definir la sociedad contemporánea como la “Sociedad de las TIC” (Tecnologías de la Información y de la Comunicación). Y es que si nos detenemos a pensar, ninguno de nosotros podríamos imaginar nuestro día a día como tal, sin evidenciar el gran impacto que las nuevas tecnologías han ejercido en nuestras vidas.
Hoy en día la información es inmediata, y cada vez utiliza los mejores medios de transporte para su transmisión (internet, redes sociales…). Tanto es así, que ninguna entidad, por pequeña o grande que sea, está exenta a la influencia de las nuevas tecnologías; tanto los centros de enseñanza, como las entidades financieras, pequeños comercios, grandes superficies, o los propios centros médicos…etc, nos vemos cada vez más inmersos en una generación de cambios tecnológicos a los que nos debemos adaptar.